“El fuego era muy intenso. No nos podíamos acercar ni a diez metros de distancia porque nos quemaba”, contó Ricardo Moreno Vidal, oficial inspector de la Asociación de Bomberos Voluntarios de San Miguel de Tucumán, mientras las llamas superaban los ocho metros de altura.
Un terrible incendio se produjo en la tarde-noche de ayer en un depósito de colchones ubicado en Gorriti al 100, a la altura de avenida Mate de Luna al 3.400 en barrio Belgrano, al oeste de la capital tucumana. No se registraron heridos; sólo daños materiales.
Según personal de bomberos, el fuego se inició porque en una casa vecina estaban parchando un techo con lamiplast y aparentemente un pedazo ardiente de este material habría caído en el interior del depósito.
El siniestro comenzó alrededor de las 18, según contaron los vecinos de la cuadra. La dotación de Bomberos Voluntarios de la capital, que fue la primera en llegar, lo hizo pasadas las 19 en una autobomba de grandes dimensiones y en pocos minutos descargaron 10.000 litros de agua.
El oficial Moreno Vidal dijo que recibieron una llamada telefónica a las 18.30, alertando sobre el incendio. “Después de recibir el llamado nos demoramos ocho minutos en llegar. Ya en el lugar nos dimos con un fuego muy intenso. No nos podíamos acercar ni a diez metros de distancia porque nos quemaba”, relató.
En los minutos de mayor voracidad, las llamas superaron los ocho metros de altura y los automovilistas que circulaban por Mate de Luna podían observar, a lo lejos, una intensa bola de color naranja que contrastaba con el oscuro cielo nocturno.
Los vecinos salieron de sus casas y desde las veredas observaban cómo el fuego arrasaba con todo lo que había adentro. La preocupación aumentó cuando el techo de chapas se derrumbó sobre el depósito. Ninguna de las casas lindantes sufrió daños, informaron fuentes policiales.
“La estructura de hierro del techo se dilató y colapsó hacia adentro. No se afectó ninguna de las paredes medianeras de las casas vecinas”, explicó Mario Herrera, jefe a cargo del cuerpo de Bomberos de la Policía
Según Herrera, las paredes del inmueble dañado no corren riesgo de derrumbe. “Ahora resta terminar de extinguir pequeñas llamas y remover las chapas y escombros. La tarea de enfriamiento demandará muchas horas”, añadió.
Seis dotaciones de bomberos de la Capital, Yerba Buena y Tafí Viejo se necesitaron trabajaron desde las 18 hasta altas horas de la madrugada. Se descargó más de 35.000 litros de agua.
Al menos tres bomberos sufrieron principio de asfixia. Fueron atendidos por médicos del Siprosa y de la Asistencia Pública municipal. Policías del 911 cerraron el tránsito a los conductores por varias horas en el cuadrante conformado por las calles Gorriti, Mate de Luna (mano sur), Medrano y Crisóstomo Alvarez.
Un equipo de ingenieros de Defensa Civil provincial trabajarán en el lugar para determinar si el resto de la estructura del galpón debe ser derrumbada.